Hoy en día, estar en redes sociales se ha vuelto casi obligatorio para cualquier marca. Pero hay una diferencia enorme entre tener presencia digital y tener una marca viva.
Una marca viva respira, conecta, incomoda, emociona. Una marca viva tiene algo que decir… y lo dice con fuerza, con intención. Mientras tanto, muchas cuentas publican sin alma, siguiendo tendencias como zombies digitales.
Señales de que tu marca está dormida:
- Posteas por cumplir, no por comunicar.
- Todo se ve “bonito”, pero no genera conexión.
- No tienes una voz clara: suenas diferente cada semana.
- Nadie comenta, nadie guarda, nadie se acuerda de ti.
¿Y cómo se ve una marca viva?
- Tiene un tono que la hace reconocible desde la primera línea.
- Tiene claridad en lo que hace, para quién lo hace y por qué.
- Publica desde la autenticidad, no desde el algoritmo.
- Genera comunidad, no solo seguidores.
¿Qué puedes hacer para revivir tu marca?
- Redescubre tu propósito: ¿por qué haces lo que haces?
- Define tu tono como si fuera una persona real.
- Habla con tu audiencia, no solo hacia ella.
- No temas incomodar: lo plano no deja huella.
Conclusión:
Tu marca puede estar activa en redes… y aún así estar muerta.
Haz una pausa, mírala con ojos honestos y pregúntate:
¿Estoy contando una historia real o solo publicando para no desaparecer?